En esta ocasión, voy a cambiar de década y
os voy a presentar a dos muñecos que seguramente sean conocidos por muchos. Se
trata de Heidi y Pedro.
Heidi fue una serie de dibujos infantiles,
inspirada en el libro del mismo título de la escritora suiza Johanna Spyri. A
mediados de los años 70 se empezaron a emitir en España los 52 episodios que
conforman la misma, siendo una serie muy seguida tanto por mayores como por
pequeños. Tras su emisión, no tardaron en realizarse diferentes muñecos que representaban
a sus personajes más destacados.
Entre esos personajes es imposible no
hacer alusión a Clara Sesemann, la Señorita Rotternmeier y el abuelo de Heidi, y, resultan inolvidables los nombres de algunos de los animales que les acompañaban,
como el perro Niebla o la cabra Copito de Nieve, pero, sin duda, Heidi y Pedro
son los protagonistas indiscutibles de una conmovedora historia que transcurre, principalmente, en
los Alpes Suizos.
Aquí están estos dos grandes amigos:
Os dejo unas imágenes de los dibujos para que podáis compararlos y recordar algunos de los personajes que he citado anteriormente.
Como se pueden ver son muñecos llenos de
color y con agradables y simpáticas expresiones en sus caras.
Ambos muñecos pertenecen a la marca Famosa
y son de mediados de los años 70. Tanto Pedro como Heidi tienen el cuerpo de
plástico duro y la cabeza de goma.
Pedro mide 33 centímetros. Como Heidi, tiene
los ojos pintados, pero, a diferencia de los de ella, son de color azul. Su nariz es achatada y en su boca se aprecia
una pequeña mueca que expresa un gesto entre preocupación y asombro. Su pelo es
implantado y de color naranja. Va
ataviado con la vestimenta propia de un pastor, lleva un sombrero de fieltro
marrón y un zurrón del mismo color, además de una camiseta naranja, unos pantalones de color azul marino
con un remiendo de color verde y unos zapatos de goma marrones igual que los de Heidi.
Por
su parte, Heidi es unos dos centímetros más baja que Pedro. Lo más llamativo de
su cara es la enorme sonrisa que nos deja entrever su carácter risueño y, por
supuesto, sus característicos coloretes rojos que destacan, aún más si cabe, entre el color blanco de su cara. También es muy destacable el color negro de
su pelo que lo presenta corto y su diminuta nariz.
La vestimenta de Heidi es la típica de una
campesina. Lleva una camisa amarilla, un vestido cuya parte superior es roja,
con un cordón negro cruzado, y la inferior es de color rosa. En sus pies sus
zapatos idénticos a los de Pedro.
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