Clavitos

Los muñecos de esta publicación son fácilmente identificables a simple vista.

Se trata de una pareja de muñecos muy graciosos, que despliegan una gran simpatía. En ellos podemos apreciar los rasgos a los que la marca b.b nos acostumbró en varias de sus creaciones, y, no puedo dejar de relacionar su imagen con el aspecto de unos pequeños duendecillos.   

El nombre que se les dio a estos muñecos no es menos singular: Clavitos. En posteriores entradas tendremos la ocasión de compararlos con otros de la misma marca y ver sus diferencias y semejanzas.

Ambos muñecos datan de los años 60 y su altura alcanza los 18 centímetros.

Como se puede observar, ambos muñecos son idénticos, con las únicas salvedades del pelo y la vestimenta de cada uno de ellos.

Sus cabezas y brazos están hechos de goma, mientras que el resto del cuerpo es de plástico.

A nadie se le escapa la expresión picaresca de su rostro, con su mirada ladeada hacia la izquierda y expresada por sus ojos pintados en color negro. Igual de llamativas son sus  orejas que sobresalen considerablemente de su cabeza.

Estos muñecos fueron presentados portando diferentes tipos de ropa. El conjunto con el que más los he visto es el relacionado a las profesiones de cocinero para él y empleada del hogar uniformada para ella, aunque existen algunos más que se encuentran con mayor dificultad, como los que aquí se muestran.

Tanto el chico como la chica llevan sendos gorros rojos de fieltro con un lazo negro en la parte frontal. También llevan sus ropas confeccionadas en fieltro rojo, pero con diferentes modelos. Para él, un peto de pantalón largo con una flor amarilla en la pierna izquierda. En cambio, ella lleva  un vestido corto o camiseta con una hebilla y unos pantaloncitos de color blanco. Los dos llevan camiseta blanca de manga corta y sandalias blancas.

Como he dicho anteriormente el pelo y peinado del chico y la chica son diferentes. Aunque en ambos está implantado  y es rubio, el de la chica es más oscuro, más largo y aparece peinado en dos pequeñas coletas recogidas con lazos blancos.

El último dato que voy a destacar es la posición de sus manos y, en concreto, los dedos índices de ambas manos, los cuales aparecen estirados como si estuvieran señalando o haciendo un gesto.

Espero que os haya gustado!!

Helena.