La actual
entrada presenta a dos muñecos de la marca ESVI, Nicasia y su abuelo.
En el año
1980, el catálogo de ESVI llevaba a su portada a esta especial pareja,
encontrando en su interior varias versiones de Nicasia. Con anterioridad a este
año, podemos encontrar diferentes muñecos de la misma marca muy similares a
Nicasia, es el caso de Puntaditas. También encontramos a otras muñecas con
nombres propios como Karina.
Los
muñecos aludidos fueron presentados como los "muñecos vivientes", y
es que no se trata de unos muñecos cualquiera. Son muñecos que representan escenas propias de
una época determinada, desarrollando sus labores cotidianas.
Observar
estos muñecos es abrir una ventana a décadas atrás, y en ello reside, en mi
opinión, el encanto que encierran.
Con unas
medidas aproximadas de 40 centímetros,
sendos muñecos son en su totalidad de goma excepto sus torsos, que siendo de
plástico duro, tienen en su interior el mecanismo que los hace funcionar. Se
trata de un mecanismo de cuerda, aunque también podemos observar que algunos llegaron
a llevar un botón para activar su mecanismo.
Los dos aparecen
sentados en sus sillas. Se trata de sillas realizadas en plástico, con cuatro
patas y respaldo.
Nicasia
es un nombre poco común en la actualidad. En realidad, es de origen griego y significa
“La victoriosa”.
Aunque la
muñeca que os presento se encuentra tejiendo con sus dos agujas, hubo varias
versiones de Nicasia desarrollando diferentes actividades. De esta forma,
podremos encontrarla como maestra, bordando con un pequeño bastidor, cosiendo a
máquina, con una rueca, haciendo bolillos, peinando o planchando. El abuelo, en
cambio, no presentó tal variedad.
A
continuación os muestro una imagen con las diferentes versiones de Nicasia a
las que acabo de hacer referencia.
También os
dejo un vídeo en el que aparecen algunas de ellas en movimiento, mientras suena
su pegadiza canción.
Centrándome
en Nicasia, podemos encontrarla con distinta ropa y pelo. La que yo os presento
tiene el pelo implantado, semilargo, liso, con flequillo, cobrizo y lo lleva
recogido con un pañuelo negro que se ata con un nudo de bajo su barbilla. Tiene
ojos durmientes de color marrón. En su
boca parece apreciarse un pequeño gesto con los labios como si pusiera
"morritos". También en su rostro podemos apreciar su nariz achatada y
sus cejas y pestañas de color marrón.
Su
vestimenta es la típica de algunas abuelas de los años 80 o de años anteriores. Este atuendo contrasta con su cara, pues, a
diferencia del abuelo que veremos a continuación, la cara de Nicasia parece más
propia de una niña que de una anciana.
Lleva un vestido de color negro con lunares blancos. Atado a la cintura con un nudo, lleva un delantal negro con un bolsillo que podría servir para guardar los materiales necesarios para su trabajo. Sus calcetines a rayas, tienen tonos azulados y blancas . En sus pies lleva unos zapatos muy cerrados de color negro. Muy característico en ella son también sus gafas negras de plástico.
Es
difícil no relacionar este muñeco con otro que ya os presenté hace unos meses,
me refiero al abuelo de Jesmarín de la marca Jesmar. Para no extenderme
demasiado, os remito a dicha publicación para que podáis compararlos.
Una cosa que me ha llamado bastante la
atención de este muñeco es la opción de diferentes materiales para el pelo de
la cabeza y el de su bigote y cejas. Mientras que en el primer caso, se ha
optado por pelo implantado en la parte lateral y trasera de la cabeza y
calvicie en la parte superior, las pobladas cejas y su poblado bigote están
hechos del mismo material que su cara, presentan un gran relieve y están pintados de blanco.
Sus ojos,
como los de Nicasia, son durmientes y de
color marrón.
Tiene una
pipa de color marrón en su boca y, como
ya he adelantado, su ropa es la habitual de muchos hombres de su edad en
aquellas época, aunque también podemos encontrarla hoy en día. En concreto, tiene
unos pantalones a cuadros de color
blanco y gris, una camiseta a rayas
verticales de los mismos colores, una especie de chaqueta o blusón negro, gorra, calcetines
negros y unas zapatillas abiertas en su parte posterior realizadas en esparto.
De forma
muy clara podemos ver que la labor que realiza, es la de los esparteros.
Sostiene en sus manos tiras de esparto que con su movimiento parece emular el
trenzado de un objeto que no sabemos cuál podría llegar a ser, ¿tal vez una
cesta para que Nicasia deje sus ovillos de lana?.
Como
siempre, espero que os hayan gustado.
¡Hasta la
próxima!
Siempre me han encantado estos muñecos mecánicos que representaban actividades de la vida cotidiana. Cuando era niña, recuerdo que me fascinaba una pequeña planchadora, que no sé si será la de la foto que has puesto. Ahora resultan doblemente interesante la actividad que realiza el abuelo, por tantos oficios artesanales que se están perdiendo.
ResponderEliminarAbrazos.
Coincido con lo que dices. Creo que son más que unos muñecos. Representan una época, una forma de vida y, como dices, oficios y labores que se están perdiendo. Aún hoy en día podemos ver a gente haciendo bolillos y a los esparteros, pero parece ya casi algo anecdótico. Me encantan porque los veo como si fueran pequeños testimonios y muchas personas aún pueden ver en ellos el recuerdo de tiempos atrás, de familiares o conocidos.
ResponderEliminarAbrazos.
Nicasia!! Esta me encantaa!!y el abuelo!que
ResponderEliminarentrañables y trabajadores!
Sí!. A mí también me encantan. Me alegra que te gusten. Ya no hay muñecos así.
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